PARADOXAS
REVISTA
VIRTUAL DEL SURREALISMO NEOBARROCO
Año
XII - N° 218
INDICE
“CONSUMIENDO INFIERNOS” - Amelia Arellano
SE QUIEBRA LA NOCHE - Guillermina Covarrubias
LA IRREDENTA TARDE… Nicolás Hidrogo Navarro
PRESAGIO - Beatriz Graciela Moyano
NOSTALGICA - Ivonne Concha Alarcón
CARTA - Fanny G Jaretón
Los Cisnes Apocalípticos - Francisco Antonio
Ruiz Caballero
LA ROSA (RE)ENCARNADA - F.S.R.Banda
EDITORIAL
"Hay
un modo de ser, un estado de ánimo, que se ha hecho expresión, sentimiento y
código de nuestra época. Lo han llamado "espíritu Neobarroco", mucho
más que un simple estilo, es multiplicidad de lenguajes, miscelánea de formas,
emociones y pensamientos. Es un discurrir eufórico, rico, abierto. Y que nos
acompañará aún por mucho tiempo. Comprende cosas que me fascinan, que iluminan
mi proceder de diseñador y empresario: la fantasía, la libertad, el juego
precioso, el placer de la sorpresa, de lo mágico, del asombro".
"El
uno, es un mundo caracterizado por el orden, la simetría, los cánones y las reglas,
la estabilidad y la contención. El otro, es el caos, la asimetría, el salir de
los esquemas, lo multifacético, lo cambiante, el triunfo de las formas: asombro
y exceso. El uno es lo clásico, el otro es el barroco. En las distintas épocas
han prevalecido el uno o el otro. Y ésta, la de la entrada al dos mil, ha sido
reconocida por muchos como la edad neobarroca. Se vuelve, renovándose, al
placer de las formas sorprendentes, al juego de las contaminaciones peregrinas.
Un mundo de símbolos y emociones,
complejo y variado, en el cual cada uno reconoce su propia y diversa
pertenencia. Hay placer, gusto, exceso de ensamblaje. El gesto que lo define es
recoger por dondequiera estímulos, distintos entre sí, prescindiendo de la
razón de sus orígenes. En lugar de elegir y seleccionar, se agrega, se acumula.
Es un nuevo eclécticismo. Para mí, el diseñador es hombre de la
contemporaneidad; esto que se llama Neobarroco, es el júbilo de la fantasía que
se libera de todo esquema impuesto por autoridad, por costumbre, o por miedo.
Es la fascinación del caos, entendido no como desorden sino como complejidad,
como nuevo misterio en el cual aventurarse con el ánimo asombrado, en busca de
algo".
"Es
el hechizo de los fractales, de las espirales galácticas, de lo maravilloso en
la pequeñez, de lo indefinido en la vastedad. Esas formas del museo de Bilbao
de Frank O. Gehry, que se escabullen, se mueven, casi se colapsan, evocan el
Caos; son la indescifrable armonía del Caos. Pero muchos se preguntan: ¿cuánto
durará?. Durará, por lo menos como
espíritu de contaminación y como exceso, porque ya no estamos llamados a
elegir, sino a agregar. Pasará mucho tiempo antes de que se abandone -si alguna
vez se hace- el espíritu de acumulación.
Y sobre todo, no se abandonará el placer de la fantasía, gozosamente
liberada".
Fragmentos
de un texto publicado por Leopoldo Poli, en su revista Momento, 1998, Florencia.
Pirateado del blog “Amaras las joyas”, de Concha Martínez.
Vale.
El Editor
“CONSUMIENDO
INFIERNOS”
Amelia
Arellano
Yo vengo a ofrecer mi corazón"
“…fui consumiendo infiernos para salir de vos...”
BERSUIT VERGARABAT (*)
Hoy me necesito mas que nunca, amor.
No más extranjera en mi casa natal.
No me apadrines mas, incertidumbre.
No mas “la cría repudiada,
hija de gato errante y de gata cautiva”
Hoy me necesito más que en aquel enero.
Mas que el día que la tristeza me dejo vacía
Cuando agotada de sed bebí goterones de salmuera.
Cuando descubrí que su vientre era redondo y vacío.
Cuando salí de mi y me vi en esa tumba.
Hoy, necesito, besos en las manos, en las manos lirios.
Resbala tu oído por mi piel de noche.
Llena de cigarras el huerto que fue tuyo.
Llegan los malecones de la noche. El amar sin amarse.
Ven que se aparean las palomas en la sangre.
Hazme morir de nuevo para que el niño nazca.
Duerme con tu cabeza entre mis remos.
Hazme un niño de pan y golondrinas.
Se mi Dios, quita las avispas de mis muslos.
Ven. Que los cipreses se desangran.
Ven, que su sangre no se convierte en vino.
Escribo en mi río natal. No entiendo lo que dice.
Córtame estos dedos con un hacha.
Que no manche con tinta el canto de las ranas.
Bésame por última vez las manos.
Lo he deseado. No he podido.
“Fui consumiendo infiernos para salir de vos…”
Hoy me necesito más que nunca.
Hoy, no te necesito más que siempre.
(*) Bersuit Vergarabat, originalmente llamados Bersuit Vergarabat
Van de Ir y conocidos como La Bersuit, es un grupo de rock argentino,
originario del barrio de Barracas, al sur de la ciudad de Buenos Aires, formado
en 1988.1 Se hicieron notables a finales de los años noventa por combinar este
género musical con ritmos latinoamericanos —como la cumbia, el tango, la murga,
el reggae, la chacarera y el candombe— y letras cargadas de críticas hacia el
sistema político y la sociedad.
SE
QUIEBRA LA NOCHE (Prosa barroca)
Guillermina
Covarrubias.
Mi boca esta llena sombras, están llenos de ríos mis ojos, y en mi
piel la luna inquieta, se posa sobre mi cuerpo pagano, convulso, ebrio de
luces. Un surrealismo barroco, que penetra en mis sueños como las gotas y las
moléculas, átomos aguijoneando en la lengua, lamiendo las esperanzas ciegas que
se van cerrando en cruz, detrás de los astros que se deslizan como pequeñas
lámparas alucinantes- Si hasta la luna confabula hoy, esta redonda y brillante
destella puñales de plata y en mi carne mil espinas se prenden como migajas y
en mi labios un enjambre de abejas quieren vagar sin rumbo, en mi lápiz, se
deslizan como rayos. Entre mis torpes manos, se anudan las estrellas fugaces
que se arrancan de mis ojos, que hoy... quiebran la noche.
LA
IRREDENTA TARDE…
Nicolás
Hidrogo Navarro (*)
La irredenta tarde gorjea sobre mi sien partida entre mil
hemistiquios y hexámetros pírricos. La diáspora tarde se enneblina con un
ciclópeo opúsculo alófono en tu mirada. La tarde maxilar me perturba y me hiere
con su mirada y risa rabelesiana. La tarde conjuncionada de complots se mofa
del protoplasma de mi inexacto pensar pendular. La tarde solo es un irreverente
cadáver huesudo que salpica mi anfibológico exhalar. La tarde solo es un
fantasma aterido que camina mi propio grisáceo andar. La tarde eres tú cuando
no me miras ni me mimas.
(*) –Narrador peruano. Hacedor literario.
PRESAGIO
Beatriz
Graciela Moyano
Un fiel intérprete de los sentidos, el presagio, se instaló en un
rincón de la mente de forma sutil como garúa tenue fue su presencia, oliendo a
inseguridad temor o alivio, intuyendo destierro que se entremezcla con el soplo
de aire fresco, con la suave brisa matinal en alas de calandria cautiva de
ansiada libertad. Se quedó persistiendo, presagiando quietecita y tenaz. En
la ciudad de la furia había un desgano de siesta soleada, igual al de las
provincias de aquel norte, con esa pereza de tarde estival de cuarenta
insoportables grados, evaporando lentamente los más fervientes anhelos y así
buscó la sombra de las acacias de ramas entretejidas en una filigrana que es
techo y túnel verde de gran belleza, entre recortados sentipiensos se dijo:
esta es la verdad donde el ser Supremo se expresa con la magnificencia del amor.
Sobre el manto de hojas esparcidas maduró la mutación en soledad, observó el
enredo falaz de esos castillos de ficción y asumió la evidente cortina de humo
azul que por largo tiempo mantuvieron a sus ojos nublados, no quiso consuelo
buscando un aliado en el recuerdo, tampoco creyó en los dichos fantasiosos que
niegan ilusiones y las elaboran a toda hora, quedó adormeciendo, enmudeciendo
palabras en un bostezo aletargado de paz y dejó a sus guías invisibles la
difícil labor de borrar los archivos de la memoria atascada de spam.
NOSTALGICA
Ivonne
Concha Alarcón
Los tiempos ocurrieron extraviándose entre páginas amarillas,
suceden lluvias que recorren desde el cielo al infierno, despiertan el insomnio
con sus gemidos sobre el zinc en noche intensa, manos vacías sin caricias, sin
sentido, recorriendo las ciudades de la orfandad, de oscuridades en el profundo
nocturno entre brazos solitarios sin tibiezas que ya olvidaron acunar, hojas
secas esparcidas en la desierta calle fría y solitaria del olvido. Recuerdos se
dibujan en los portales añosos, se sienten olvidados por las lejanas
primaveras, se miran los pétalos de rosas esparcidos en el otoño inminente,
duele el sentir de las mariposas nocturnas. Y tendida sobre las praderas las
verdades cuentan las perlas negras del collar de las ilusiones perdidas,
caracolas del mar esparcidas por los verdes pastos emitiendo sus runrunes
mientras se mecen los lamentos de los lirios. Todo sucede en los largos
silencios que susurran sutilezas a escondidas de los pinceles súbitamente
dibujando huellas sin pintar, el tiempo sucede sin bosques, sin caminos, sin
risas ni sonrisas, es el polvo árido desértico que dejaron los caminantes al
pasar, marcas de hierro oxidado en la tristeza larga empañada de nostalgia,
creciendo entre dos siglos, entre añoranzas, y recuerdos a paso cansado, camino
lento, ojos buenos casi sin vida, solo paisajes otoñales, hastiados de mirar
hacia adentro sin querer más historias, sin querer más lamentos, solo esperando
sonrisas y caricias que acunen el camino sin regreso… aun vivo.
CARTA
Fanny
G Jaretón
Querido mío:
no me condenes a escucharte decir de la muerte, no la llames, no la
invoques, no haga que restauremos la historia de Julieto y Romea, esa pasión
que fue tras la muerte por amor que dice, porque si es en el más allá la
edificación por lo Residual, como rescatadora de lo que queda, así en palabras
de Quevedo, <<…sólo lo fugitivo, permanece y dura…>> pero no,
porque ya me conocés, yo que soy tan terca, revolucionaria, como el verdadero
Jesús, no el que pintan santito, aunque si de santo, pero más de guerrero, más
de desafiante, tenía ese amor que dicen que vino para Salvarnos, así es que me
paro y grito frente a los estrabismos donde miran los otros, y te condeno, a
que te quedes vivo y en mis pulsiones, a que ya no digas de esa derrota que hoy
cantas con el laúd; quién es la muerte que te llama dulce, dulce, quién es esa
perra que quiere morder sobre tu carne, si vos sos mío hasta el hueso, la más
medula de nuestra historia secular y celular por donde nos navegamos todos los
Cantos del río que mira hacia el Edén por el lugar donde amanece la OraSión ,
ay por esta plegaria que te elevo, y te pido, que si dejaras seducirte por
ella, me harías decir lo que á en mi Intimatum y ya no quiero: Tuve un pensamiento:/Si
mi amor me deja/ dejarme /con tres tiros en la boca/mi palabra.
Y no creo que quieras que me envenene con la cicuta de lo anónimo,
sin ánimos de la reyerta para que nosotros pre-existamos en el libro de la
Memoria ; que termine con el lenguaje que tantas veces nos ha dado vida, donde
escribimos como ketubim, como los Jueces y por orden Profética nuestras
sentencias, y en esa fracción que nos quiebra, por quebrado la nuestra es una
obra de amor y por amor, por ese mismo amor desde donde Valéry nos dijo con
claridad:”No sería posible amar lo que no es conocido perfectamente. El amor se
dirige a lo que está oculto en su objeto. Lo amado es por definición en cierta
manera, desconocido. Te amo, luego, no te sé. Luego, te construyo te hago; y tú
me deshaces.>> Hemos llamado al Misterio, nos hemos orillado y hacia el
centro con los vientos del arcano, me hiciste decir de prestidigitación, te
aparecés al costado de mi cama cuando duermo y me despertás con el picor de tus
labios en mi boca y yo te miro con mi ojo fantasma, arrastro hasta tu cintura
las cadenas que te atan a mi carne ardiente y te convido con el movimiento
donde la danza te hace despedazarte de las mil y una maneras, y aunque te
duela, mi egoísmo puede más, porque quiero tenerte amarrado a todas mis
insinuaciones, y ahí cuando ya nos sobran las palabras vos sabés, porque lo
sabés desde el neointelectualismo, que sacudirnos jadeados nos hace un no
precisadores del tiempo. Y me dirás que allá en lo Absoluto el tiempo se mide
con micrones de nuestros besos desarraigados, y yo te diré que encarnada en tu
diablura es que quiero saber del sabor de tu infierno.
Me he enojado con los que dicen que poesía es la expresión del alma
y agregan que cómo los poetas vamos a engañar a la gente si no sabemos que es
el alma, menos vamos a saber de su expresión.
Tan equivocados, ¡tan equivocados! El alma es ese temblor que me
derriba cuando ajustás tu cuerpo a mi endiosura, cuando breve el milagro se me
hace largo entre tus manos-la prisa- de la caricia que obscena me lleva al
Paraíso de la alegría OhCulta. El alma es la no vergüenza, es el pacto de
sangre que hemos cruzado cuando me desayuno y volviéndome a las raíces donde sé
que debo buscarte, saboreo un pan con manteca y un filete de sardina,
salmemuera sin vos ese bocado, el mar y el yodo repasando todos tus sabores,
tarascón al labio donde muerdo tu nombre y ese sabor metálico que ahora me
acompaña me hace suponer, indagarme si sabes a la naranja mecánica que kafkiana
dio origen a nuestra metamorfosis.
Pececitos embrionarios danzando el glu glu de las ensoñaciones,
frente al pasado y a la muerte no podrás conmigo y te envisto pelvis abajo y te
hundo y te hundo para meterte y seas a parición Hijo del Prodigio.
No amor, ya no has de nombrarla, porque si con este intento
reiterativo tuyo me empujaras a la prostitución, estoy dispuesta, voy a
hacerlo, te lo prometo, besaré pura moneda a Caronte en sus ojos, me acostaré
con él, venderé mi cuerpo a cambio de la persuasión que no te lleve hasta la
Costa donde deberás seguir ese viaje que tan interminable se me hará sola con
los remos pesados en el mar de la nostalgia, luego hasta alcanzarte, y ya
puesta allí si debo acostarme con el Ángel de la muerte para seducirla, ganarle
y que te perdone esta vida precaria pero que nos llena de gozo, este satisfecho
cuerpo que vino a embriagarse de un nosotros Pretérito Perfecto para
embarazarnos de la Fascinación de la Fantasía , lo haré, lo haré todo por vos.
Es mi garganta que se quiebra una vez más frente al conjuro. Anoche
he llorado en la cuenta de las perlas de este rosario de Universo, le he pedido
a Dios fuente todopoderoso y vencedor que me done la ambición de que
permanezcas, en pie de guerra tu Palabra para que me des vida, para que me des
la suerte ésta de las cuatro hojas del trébol diamantino en el eterno retorno.
Te hablo del aquí y el ahora, te hablo del siempre que se consume en
el eterno siempre sempiterno, te hablo desde mi ensanchado abrazo que te espera
caliente para guarecerte de todo otro mal y tentación.
Vos que sabes del dolor, del dolor de verdad, ese que te ha comido
más que cualquier enfermedad de la mala palabra, ese dolor social, ese
sufrimiento ante el hambre del prójimo, la degeneración, degradación,
garrapiñería y abuso del pulpo del mal dirigido establishment; vos sigiloso,
cauto, observador como el águila, vos astuto zorro, vos que me llegas cada
noche desde el fondo de la noche para inaugurar mi vida en sueño que a tu lado
es sólo sueño, vos no nos despertés a la orilla Anciana, que todavía hay vino
de juventud en nuestra sangre, hay putasutra, paredones de fusilamiendo, coces,
fulgor, empiritísmio en este ser del Ser; y sé porque no soy tonta aunque el
amor me ha puesto cara de mujer y te miro y te miro babosa elocuente por el que
sos y me espera, no el querer que alimenta del no tenerse, sea en tu abrazo la
Vida el lugar, la red que nos contiene; ahora y siempre.
Desde el profundísimo Amor, estas palabras escritas con sangre y
optimismo.
Amén selá, bendecidas sean, vida en Vida para tu Nombre.
Sensiblemente, Fanny
Los Cisnes Apocalípticos
Francisco
Antonio Ruiz Caballero
De repente me encuentro intentando meter el dentífrico dentro del
shampoo. Me preocupa, yo soy un hombre precipitado, pero este asunto del
dentífrico ha superado notablemente a todo mi catalogo de impericias. Una vez
guarde un par de calzoncillos dentro del freezer, otra vez eche detergente
dentro del colador con los fideos, algunas veces suelo salir a la calle con
zapatos diferentes, pero ni quiero recordar la vez que salí desnudo de la
cintura para abajo y camine tres cuadras hasta sentir los huevos chamuscados
por el frío; en aquella ocasión yo estaba muy atareado con mis pensamientos
sobre los cisnes apocalípticos. Había tenido ese sueño en el cual millones de
cisnes venían a exterminar la raza humana, a comerse nuestros ojos y nuestros
cerebros, algo muy similar a lo que sucedía en la película “the birds” de
Alfred Hitchcock. Lo paradójico de esta pesadilla, era que en la época que la
sufrí, yo no tenia idea de como lucia un cisne, por lo cual, no eran cisnes,
sino extrañas mutaciones rojizas con cabeza de dragón, los cuales iban echando
fuego por toda la metrópoli, quemando todo lo que veían en su camino, y luego
de incinerarlo todo, saltaban sobre hombres, mujeres y niñitos para comerle los
ojos y el cerebro… no se porque razón creí que eran cisnes, tampoco se porque
razón intento meter el dentífrico dentro del shampoo; mi mente gira como un
espiral caleidoscópico dentro de un romboide tridimensional, todo se metamorfosea
de una manera incognoscible. Mi último sueño por ejemplo, trataba de unos
perros abandonados que venían a hablarme, y eran muy cultos y soberbios, uno de
ellos era particularmente aterrorizante, tenía un par de pupilas por cada ojo y
su hocico era afilado como el de un zorro. Es mas, creo que era un zorro
mezclado con perro o algo así. En su lomo tenia un agujero que dejaba ver el
abismo vacío de sus entrañas, y no solo eso, sino que también dejaba ver que
había del otro lado, yo no entendía como lograba estar vivo y hablar tan
afablemente; miraba su lomo con sus costillas desnudas y carcomidas por alguna
muerte del pasado, y no podía procesar esa imagen. Aun así me quedaba
dialogando con los perros, que como dije antes, eran soberbios pero muy cultos.
El otro, el que aparentaba ser un fox terrier normal y mugriento, decía ser
cantante de rock sinfónico, pero cuando intentaba cantar, solo aullaba, por lo
cual supuse que había elegido el camino correcto. El otro, el híbrido del lomo
agujereado, se ufanaba de domador de elefantes, pero no le creí; tampoco le
creí cuando me despidió confesándome que en realidad no era un perro, sino un
cisne. Ahí fue cuando desperté y comprendí que esos malditos cisnes me
acompañarían por toda la eternidad; como esa música del despertador con “la
danza del los pequeños cisnes” de Tchaikovski.
F.S.R.Banda
«adonde los mundos regresan, es mi estado». Krishna, en el Bhagavad
Gita
Pagarás niña deseada y distante, pagarás tarde o temprano, en esta
vida o en la que nos viene, o en alguna de las sucesivas, pero pagarás, no
tengas duda. Y morderé tus labios en el primer beso y sentirás que ahí estas
comenzando a pagar, llegará el café y te seguiré besando, aspirando tu perfume,
apretando tus manos, saborearé en tus labios el sabor del café enamorado y
oleré en tu boca el aroma melancólico del tabaco. Anocheciendo devoraré tus
cóncavos suspiros para llevarte dormida en mis brazos a los cobijos con que has
soñado en mi nombre, será una noche de lluvias largas, que es cuando las almas
se convierten en grises pájaros entumidos buscando su propio cobijo en las
ramas desiertas de la nostalgias. Repetiremos una y otra vez las salvajes
reencarnaciones, inevitables y ansiosos, insaciables y felices, dueños del
tiempo y sus repeticiones, romperemos la rígida línea temporal para ser uno
eterno escondidos en un todavía que titila en todos los futuros nuestros. Yo seguiré
cometiendo los mismos errores, evitando el dharma (i) seguiré
manifestando los mismos pecados en mis infinitas encarnaciones para no librarme
del samsara (ii) y seguir reencarnando tantas veces como sea posibles o necesario
acurrucado a tu lado, asumiendo el karma (iii) que me llevará una y otra
vez a ti, porque con tu corazón no me basta, quiero todas tus células y todos
tus suspiros, las mínimas oquedades de tus poros y el imperceptible roce de tus
pestañas, tus pensamientos y tus recuerdos, tu totalidad carnal y tu ser misma
absoluta. Tu me induces a violar la fecha, engrupir el tiempo, adelantarlo,
traspasar su rígido tictac, apurarlo, soñarnos en un sueño real, concreto,
donde nuestros labios de verdad se toquen y yo huela tu perfume y tu sientas
mis brazos rodeándote, me incitas a romper la trama temporal (iv), me incitas a
desobedecer las leyes de la física, me incitas a desear lo que antes de ti me
parecía imposible. De tal manera que he decidido dejar este texto hasta aquí,
para siempre inconcluso..., pero no, sé que no será para siempre, solo hasta
que reencarnemos en los otros que seremos y no nos importe el que dirán y será
lo que soñamos (v), porque seremos esos otros y caminaremos por esas
callecitas como si ese mundo, sin diciembres, fuera nuestro. Entonces, en la
certidumbre de ese porvenir te prometo terminarlo en ese allá, y asumiendo la
teoría de los universos paralelos, lo concluiré de las dos maneras: como si los
besos que me debes los pagarás en esta vida vigente, y como si llegaré a
poseerte en todos y cada uno los porvenires que me has prometido. Y si no, como
ya sabemos, será más temprano que tarde en un café en una esquina de dos calles
cuyo nombre aun desconocemos porque todo sucede en un futuro del aquí y del
ahora, aunque sin fecha fijada y en una ciudad de la que solo conozco su orilla
de río, su música triste y las majestuosas palabras de su ciego inmortal.
(i) Dharma:
acciones hechas para bien.
(ii) Saṃsāra:
ciclo de nacimiento, vida, muerte y encarnación (renacimiento en el budismo).
(iii) Karma:
consecuencia de lo realizado/decidido.
(iv) “Negar la sucesión temporal, negar el
yo, negar el universo astronómico, son desesperaciones aparentes y consuelos
secretos.” Nueva Refutación del Tiempo, en Otras Inquisiciones, J.L.Borges,
1952.
(v) Si Nos Dejan.
José Alfredo Jiménez
La
forma de poema es una desgracia pasajera.
Osvaldo
Lamborghini, “Die Verneinug”, 1977.
Revista PARADOXAS N° 218
5 de
Marzo de 2016